Precisamente, hace un año, coincidiendo con esta celebración, se anunció la finalización de las obras en el Torreón y el inicio de la siguiente fase, la búsqueda de apoyo económico para sacar adelante y articular el museo. Con tal fin, el alcalde, Félix Ipas, hizo entrega de una copia del proyecto a la consejera de Educación, Mª Victoria Broto, asistente a la fiesta, quien anunció el compromiso de su departamento a apoyar la iniciativa y a involucrar en el mismo a otras instituciones y entidades.

Mientras se avanza en ese sentido, los ansotanos volverán a enseñar la riqueza y diversidad de un vestuario tradicional que hasta hace no tanto empleaban los ansotanos, tanto para sus quehaceres ordinarios como para las ocasiones especiales. La última persona que visitó el traje de manera ordinaria fue José Puyó que murió en 1992.

La fiesta del Traje Típico de Ansó se viene celebrando el último domingo de agosto desde 1971, y fue declarada Fiesta de Interés Turístico por el Gobierno de Aragón en 2004, ya que da a conocer uno de los legados culturales más importantes de la comunidad aragonesa, siendo uno de los más antiguos y complejos de la Península. Gracias al empeño de sus vecinos ese patrimonio ha llegada hasta nuestros días y cada año, en esta celebración, lo enseñan, además, reproduciendo escenas de la vida de antaño.

Así, los ansotanos ataviados con sus indumentarias tradicionales salen a las calles y dan a conocer este importante legado, primero contextualizado –con la recreación de antiguas cocinas, escuelas o lugares de costura- y luego, en un desfile en el que se explican las distintas indumentarias y los momentos en los que se emplea cada una. Los centenares de visitantes que acuden a ver esta celebración, pueden distinguir trajes para bautizar a los niños, para la primera comunión o para la confirmación (denominado de periquillo). En el caso de los adultos la vestimenta podía ser para las labores diarias o para las fiestas, para acudir a misa, para la ceremonia del matrimonio o para desempeñar las tareas de alcalde.

Este domingo, 30 de agosto, todas estas variedades volverán a mostrarse en una jornada que, como siempre, comenzará con la invitación a comer migas que los ansotanos hacen a los visitantes, la ya mencionada escenificación de la vida cotidiana y el desfile, y una misa con la Coral Ansotana. La música popular amenizará el resto de actos de esta tradicional fiesta del traje ansotano.